La evolución de la raqueta de tenis hasta ahora

La potencia y el control son esenciales para los tenistas ambiciosos. Las nuevas tecnologías para raquetas de tenis ayudan a implementar ambas en casi todas las canchas.

Los jugadores de tenis están obsesionados con su equipamiento. Encontrar personalmente la mejor raqueta puede ser una tarea de toda la vida. La raqueta es el brazo extendido del jugador en la cancha. Con el golpe perfecto, los jugadores y las raquetas se fusionan en uno: una sensación de felicidad con la que sueñan todos los tenistas. Por lo tanto, no sorprende que la búsqueda de la raqueta de tenis perfecta sea tan antigua como el propio deporte.

El origen de las raquetas de tenis

El tenis tiene una rica historia, cuyos orígenes se remontan al siglo XII. Sin embargo, la primera raqueta de tenis no se fabricó hasta 1874. Estaba hecha completamente de madera, por lo que John McEnroe podría haber causado daños graves en ese momento.

Hasta 1968, la primera raqueta de acero salió al mercado y se convirtió en leyenda cuando la superestrella Jimmy Connors jugó con ella. La siguiente revolución llegó una década después con la introducción de la raqueta de aluminio. El uso de grafito en los años 80 hizo que las raquetas fueran más ligeras y la evolución de las raquetas de tenis continuó.

Estas innovaciones han sido impulsadas por la necesidad de un mejor control y el deseo de más potencia.

EL SANTO GRIAL DEL PODER Y EL CONTROL

Los tenistas exigen potencia y control, dos conceptos que antes se consideraban incompatibles en la industria del tenis.

En la mayoría de los casos, los palos que ofrecen mucha potencia tienen una cabeza más maciza, lo que aumenta el efecto trampolín. Además, estas raquetas son más livianas, más largas y más rígidas, lo que hace que la pelota rebote más rápido y a mayor velocidad. Por último, pero no menos importante, tienen un peso superior equilibrado para mantener suficiente peso en la zona de impacto.

Las raquetas diseñadas para el control, en cambio, suelen ser más pesadas y tienen una cabeza más pequeña y menos deformada. Los marcos más delgados y flexibles permiten que la pelota se asiente en la raqueta por un poco más de tiempo y le dan al jugador más control.

Además, las raquetas orientadas al control suelen ser pesadas para los dedos para una mayor movilidad. Estas raquetas están diseñadas para jugadores que quieren usar su fuerza y, sobre todo, esperan más control de la raqueta.

Tecnología moderna utilizada en la raqueta de tenis

Para encontrar el santo grial y combinar ambas habilidades, HEAD se inspiró en varias industrias, incluido el mundo de la automoción y la fotografía. Los conectó con su ya avanzada tecnología de fabricación de raquetas de tenis.

El resultado es un concepto multimaterial que combina dos materiales con ventajas complementarias. El magnesio moldeado por inyección, como el que se puede encontrar en las carrocerías de los coches, es el complemento perfecto para las raquetas Graphene Touch de HEAD.

El concepto de múltiples materiales crea una unidad perfecta a partir del procesamiento liviano, estable y de alta precisión del magnesio y las cualidades de absorción de impactos y absorción de impactos de Graphene Touch. Con MxG – magnesio y grafeno – HEAD ofrece lo mejor de ambos mundos.

El corazón de la nueva raqueta de HEAD radica en el diseño y la construcción del exclusivo puente de magnesio. Su diseño aporta a la raqueta una potencia y un control adicionales más allá de las ventajas de los propios materiales.

Los profesionales del tenis ya se han dado cuenta del nuevo desarrollo.

Cuerdas de raqueta de tenis

A nivel técnico, las cuerdas verticales se pasan por el puente, mientras que en las raquetas convencionales, las cuerdas de tenis solo tocan el puente en la parte superior. Esto alarga las cuerdas principales que se mueven libremente, aumentando el efecto de trampolín y el punto dulce. Además, el puente de magnesio tiene un área de contacto con el marco más grande que una raqueta convencional, para una mayor estabilidad y, en última instancia, más control.

La construcción no solo es técnicamente revolucionaria sino también estéticamente impresionante. O, como dice el doce veces campeón de Grand Slam, Novak Djokovic: «Se ve impresionante… como una espada».

De hecho, esta no será la última innovación en la búsqueda de la raqueta de tenis perfecta. Sin embargo, las calificaciones de jugadores como Djokovic y Fritz podrían verse como una indicación de que la tecnología MxG cambiará irreversiblemente el deporte al combinar finalmente potencia y control en una sola raqueta.